Los accidentes no son por falta de ITV
Con relación a la verificación vehicular que en algunos
lados es obligatoria y en otros no, y se supone que es para evitar accidentes,
me vino esta reflexión. Casi el 100% de los accidentes graves que uno ve a
diario no son por fallas mecánicas, son por fallas humanas. Los peores los
producen autos de alta gama prácticamente nuevos (que aprobarían con un
“excelente 10” cualquier verificación técnica), porque en general borrachos y
estúpidos están al volante; también la falta de pericia en el manejo, junto a
los que se creen corredores de fórmula uno es causa de accidentes; esto en
cuanto a los autos particulares.
En lo que toca a los medios de transporte, camiones y taxis
sí es indispensable la revisión técnica anual; de la que no debería escapar
ningún vehículo en toda la República. Un colectivo, taxi o camión tiene que
tener las cubiertas bien, los frenos y luces deben estar perfectos, una buena
combustión, no pueden tener podrida la carrocería, seguro al día, etc., y
tampoco tener una antigüedad de museo.
El Paraguay es un país chico, debería tener una sola
central, nacional, que registre a todos los vehículos, reglamente su
circulación y otorgue el carnet de conducir; las municipalidades deberían acatar
a esta central y no decidir lo que se les antoje. El costo de la patente tiene
que ser igual en todo el país y la chapa identificatoria una sola para toda la nación.
En los distintos municipios deberían funcionar las oficinas que dependerían del
registro nacional no del municipal. Cuando a un vehículo nuevo se le da un
número de patente, este número por más que se transfiera a otro titular, las
veces que sea, siempre debe seguir siendo el mismo.
Y lo más importante, el curso de manejo para los que quieren
un carnet profesional, que no implica solamente dominar el vehículo, sino
conocer al dedillo las leyes de tránsito, exámenes psicológico y físico; que un
registro profesional no se consiga como si fuera una cédula que le dan a
cualquiera, que se obtenga después de un riguroso examen, que el que lo obtiene
se sienta orgulloso de él y así valorizará su profesión. Lo mismo para los que
andan en moto, para obtener el registro deberían hacer un curso.
La mayoría de los accidentes fatales son directamente por
imprudencia en el manejo e indirectamente por negligencia o falta de idoneidad
en los funcionarios responsables, no por falta de ITV.
Rafael Luis Franco
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