POR UN VOTO CALIFICADO
No
hace mucho escuché decir a una persona que la gente que cobra planes
sociales no debería votar; al respecto se levantaron opiniones en
contra y a favor. A mí en lo personal me pareció una buena idea, y
le agregaría unos cuantos motivos más para no votar.
Primero
aclaro que siempre fui la idea del voto libre, no obligatorio, como
pasa en las primeras y más largas democracias; ya que la
obligatoriedad es algo compulsivo, deja de ser un derecho, y muchas
personas lo hacen solo por dicha obligatoriedad no porque les
interese el devenir político de la Nación.
Bien,
entre otras razones, aparte del cobro de plan social por parte del
Estado, considero que tampoco deberían votar: los empleados
públicos, desde el ordenanza hasta el más alto funcionario; los
políticos en campaña, que a su vez son funcionarios; los senadores,
diputados, jueces, policías, militares, o sea todo aquel que de una
u otra manera recibe un sueldo del Estado, a nivel provincial o
nacional.
Por
qué. Porque, imaginen por un momento que viven en un edificio de
cientos de departamentos, y hay que elegir al administrador y consejo
administrativo, en estas elecciones se sabe solo votan los
propietarios u inquilinos, ahora imaginen que permitieran votar al
administrador y sus empleados, que todos viven en el mismo edificio;
a quién creen que votarían estos; adivinó, al administrador que
les da trabajo. Así pasa con los empleados públicos, sobre todo en
los estados provinciales, donde en algunos casos el empleo público
supera el cincuenta por ciento, y hay gobernadores que tienen más de
tres décadas en sus puestos, o alternan con sus familiares.
Por
otro lado, los presos en cárceles tampoco deberían hacerlo; porque
es conocida la conexión que hay entre el narcotráfico y mundo del
hampa con cierta política que nombra jueces generosos en sus fallos
hacia criminales de toda laya, pero especialmente generosos con los
de guante blanco.
Por
otra parte, así como no debe ser obligatorio el voto los que quieran
hacerlo deberán empadronarse, y aprobar un examen de educación
cívica que los habilite para votar; porque si para manejar un auto o
moto se necesita un permiso de conducir que demuestre su idoneidad,
pienso que el votar, como viene la mano, es igual o más peligroso
que manejar en la vía pública.
Qué
se conseguiría con estas medidas, se conseguiría un voto más
calificado; porque está visto que la democracia directa tal como se
la practica en la actualidad nos lleva directa y sin escalas a un
gobierno totalitario, o sea a la desaparición misma de la
democracia.
Miremos
el ejemplo norteamericano, ellos no tienen democracia directa, es
indirecta, no son tontos; ellos votan electores; su Colegio Electoral
se compone de 538 miembros, y esto lo vienen haciendo desde que se
independizaron, hace más de dos siglos, y nunca modificaron este
sistema; así llegaron a ser primera potencia mundial. Noten que
entre los más de trescientos millones de habitantes solo medio
centenar de personas deciden quién es su presidente, un mes después
de los comicios, no obligatorios. Y estos electores que representan a
uno y otro partido, el día que les toca pronunciarse pueden
modificar su voto, como algunos lo hacen. Así vemos que en la última
elección presidencial la candidata, Clinton, que ganó el voto
directo con cerca de tres millones no tuvo los electores necesarios
para ser elegida y sí los tuvo Trump, además cuando se reunió el
Colegio Electoral varios electores de la candidata perdedora se
volcaron al actual presidente (304 a 227, 77 electores de
diferencia). Y este sistema, cuando comenzó nuestra independencia
allá por 1811, también lo teníamos, ya que al gobernante y la
forma de gobierno que queríamos se decidía en asambleas de vecinos,
a las que concurrían en número de mil las personas más
representativas de sus comunidades; así fuimos una Nación pujante,
con una economía floreciente, sin corrupción, sin analfabetismo y
con los mayores adelantos tecnológicos de la época; hasta que
fuimos arrasados por la guerra.
Bien,
sé que todo esto, el voto calificado, es difícil de lograr, porque
entiendo que un amplio sector manejado por la corrupción política
no lo va a permitir; y otro amplio sector de la población no lo
entendería o vería bien. Pero si piensan o creen que con esto
podría terminarse con la compra y venta de votos y dejar un mejor
país a sus descendientes, no estaría mal proponerlo y difundir.
https://www.paraguaymipais.com.ar/opinion/por-un-voto-calificado/
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