De Franklin a Trump

17 DE FEBRERO DE 2016 01:30

O la decadencia del imperio americano.

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Benjamín Franklin, el gran inventor y mejor político, al que se considera factótum y uno de los redactores de la carta de la independencia americana, hábil diplomático, músico, científico, creador de numerosas instituciones dejó a la humanidad, cuando apenas tenía 20 años de edad, sus máximas o virtudes que él consideraba debía poseer el hombre:

La templanza: no comas hasta el hastío, nunca bebas hasta la exaltación. El silencio: solo habla lo que pueda beneficiar a otros o a ti mismo, evita las conversaciones insignificantes. El orden: que todas tus cosas tengan su sitio, que todos tus asuntos tengan su momento. La determinación: resuélvete a realizar lo que deberías hacer, realiza sin fallas lo que resolviste. Frugalidad: solo gasta en lo que traiga un bien para otros o para ti; no desperdicies nada. La diligencia: no pierdas tiempo, ocúpate siempre en algo útil, corta todas las acciones innecesarias. La sinceridad: no uses engaños que puedan lastimar, piensa inocente y justamente, y, si hablas, habla en concordancia. La justicia: no lastimes a nadie con injurias u omitiendo entregar los beneficios que son tu deber. La moderación: evita los extremos; abstente de injurias por resentimiento tanto como creas que las merecen. La limpieza: no toleres la falta de limpieza en el cuerpo, vestido o habitación. La tranquilidad: no te molestes por nimiedades o por accidentes comunes o inevitables. La castidad: frecuenta raramente el placer sexual, solo hazlo por salud o descendencia, nunca por hastío, debilidad o para injuriar la paz o reputación propia o de otra persona. Y la humildad: imita a Jesús y a Sócrates.

Todo lo contrario de Donald Trump, del que sabemos que es multimillonario, vanidoso, grosero, medio narcisista, populista y además quiere construir un muro; o sea el típico candidato ganador que gusta en el tercer mundo si fuera candidato del tercer mundo.

Aunque nosotros no tenemos mucho de que vanagloriarnos, ya que también el título podría ser del Dr. Francia a Calé o Nicanor, o quien le guste más, ya que nuestro padre de la patria fue un gran admirador de Franklin y muchas de las virtudes que este planteó fácilmente las vemos reflejadas en nuestro dictador perpetuo, que ejerció el cargo con honestidad, ejecutividad y patriotismo, además de llevar una vida ejemplar; el polo opuesto de los actuales dirigentes.

El tema es que USA es el último gran imperio de esta civilización y su decadencia interna, que la vemos reflejada en los candidatos a conducirla, abre un enorme vacío, tal como aconteció otrora con otros imperios que luego desaparecieron. Quién será el próximo nadie lo sabe; lo que sí sabemos es que cada vez que esto sucedió fue como un gran tsunami para la humanidad.

Rafael Luis Franco

https://www.abc.com.py/lectores-opinan/de-franklin-a-trump-1453890.html